Mi
último descubrimiento...
...
el té Rooibos
Se
trata de un "falso té", debido a que
no procede de la Camellia Sinensis.
La planta de este té crece exclusivamente en
Sudáfrica, al norte de Ciudad del cabo.
Es
un té que no contiene teina.
Esta cualidad, unida a otras que comentaré ahora,
lo hacen apropiado para tomar a cualquier hora del día,
tanto por adultos como por niños, para mujeres
embarazadas y en período de lactancia.
Además
tiene un bajo contenido en taninos,
los cuales reducen la absorción del hierro, como
ocurre con el consumo de té negro. Esto se traduce
en un sabor dulzón, diferente del convencional
sabor amargo de otros tés y que está provocado
por la presencia de taninos.
Se
ha demostrado que el consumo de este té es de
gran ayuda en el tratamiento de insomnio, irritabilidad,
dolores de cabeza, tensión nerviosa e hipertensión,
por sus propiedades relajantes..
Así
mismo sus cualidades antiinflamatorias y antiespasmódicas
aconsejan su uso para el tratamiento de los cólicos
del lactante.
En
Sudáfrica este té ha sido usado siempre
para tratar alergias como la fiebre del heno, asma y
eczemas, de una forma muy efectiva. Del mismo modo,
puede utilizarse para tratar afecciones cutáneas,
para el alivio de picores, heridas e incluso el acné,
aplicándolo directamente en las zonas afectadas.
Debido
a su contenido en agentes antioxidantes, ralentiza el
proceso de envejecimiento en las personas y refuerza
el sistema inmunitario, por lo que supone un buen remedio
para el tratimiento de afecciones víricas y bacterianas.
Es
una bebida rica en minerales, cobre, hierro, potasio,
calcio, fluor, zinc, manganeso, y magnesio.
Afortunadamente,
este té se está haciendo cada día
más conocido fuera de su lugar de origen y ya
puede obtenerse diferentes tipos de presentaciones y
sabores. Un aspecto a tener en cuenta y que afecta a
la calidad de este estupendo té, es el modo de
cultivo, siendo deseable que proceda de cultivo biológico,
sin ningún tipo de tratamiento añadido.
